te desvaneciste y seguiste siendo luz. dime cómo se siente ser un salvador invisible que me aturde en el silencio. deja de prestarme tus ojos, ya es tiempo de ver con los míos. todo está tan abierto que casi cierra. deja de salvarme porque ya es hora de que me hunda con tus latidos. sigo perdiendo tiempo con cosas comunes y corrientes cuando ambos podemos descubrir un nuevo mundo. todo lo que tenemos que hacer es intentar una vez mas. dime cómo se siente viajar en el tiempo a través de siete mares y un túnel de llanto para llegar a donde estamos. un día ambos seremos la nube que nos separa, la brecha que se burla de las imprudencias del destino y de nuestra maldita fortuna. solo tratemos de largar un suspiro más hacia el sol y sentarnos a esperar. tú ahí, yo acá, pero mi corazón del tuyo no se arrancará.

Tus fotos cuelgan en la pared y tu mirada recae en mis ojos. Trato de no perderme en la profundidad de ellos, pero es casi tan imposible como intentar no reír con cada susurro. Abrázame. Solo mantente junto a mi. No dejemos que esto caiga por más que nunca estuvo sostenido. Matemos juntos al tiempo. Volvamos a tomarnos de la mano para caminar en cámara lenta mientras el mundo se acelera. Volvamos a aquel segundo en donde el viento soplaba a nuestras caras y el amor parecía un conjuro realizado. Vuelve a mirarme para sentir esas cosquillas en el estomago y ese nudo en la garganta. Hazme tan feliz como aquellos días. Hazme saber que la sonrisa por más de que sea efímera podría durar un siglo estando a tu lado un instante. 
-No se que más decirte más que un "te amo"
-No digas nada. Dame un beso.
Te puedo esperar con tal de que sostengas las promesa de que volverás. Porque el verdadero amor espera.

Neverending

Y hoy lloré. A veces los sentimientos se me escapan del corazón y entran como dudas en mi cabeza. Son tus palabras frías las que juegan con mi imaginación y perturban mi realidad. Son tus ojos a los que miro sin ver lo que yo te envío. La sangre me hierve cuando veo tus sonrisas desperdiciadas en otras cuando podrían ser únicamente mías. 

Como un bocado de la prohibición, como un paso a la elocuencia, como una tentación al dolor, como una invitación a la locura, como la sal en la herida... así es nuestro amor. 

Me advertiste que sería una masacre. Me advertiste que de esta avenida los corazones no salían con vida. Y me negué a escuchar los susurros que salían de entre tus labios... y te seguí eligiendo. 

Ya no hay más que hacer con el dolor. 

Y duele más saber que no me elegirías a pesar de que fuera la única.

Pasado pisado y presente odiado

Me dijeron que podía ser feliz sin la compañía de alguien, pero hoy tan solo veo esas palabras como un dicho difamado. No siento un corazón si no latidos sin sentido. El mundo corre, las personas cambian, los rascacielos siguen creciendo y yo me sigo quebrando. Recuperaría parte de lo perdido con tu sonrisa. 
Sintiendo mis pedazos caer pienso; si recuperáramos el tiempo, ¿todo sería igual?
Nada de culpas el uno al otro, ¿no? Nosotros no somos culpables del delito, no somos culpables de amarnos. No somos culpables de dejarnos sangrando ni tampoco de robar nuestros corazones. No hay culpas. 
Ignorame, escondeme, fingí que no existo. Ambos sabemos bien lo que fuimos.

Memories

Solía mirar desde adentro de la estancia, con cara preocupada, hacia el firmamento cansado de cambiar su humor. Si llovía, me colocaba mis botas amarillas y salpicaba las paredes saltando en charcos. Si el sol resplandecía , me envolvía en ligera ropa para correr entre los galopantes caballos. El viento con aroma a miel soplaba en mi cara y besaba mis mejillas secas, sin lágrimas, sin reposo de ninguna gota dulce de amargos sentimientos. Mis manos tocando las espigas que pinchaban las yemas de los dedos pero no había dolor. Mi cabello despeinado flameante entre las nubes de deseos y sueños aun vivos. Las tardes acompañadas de leche tibia y golosinas azucaradas esperaban ansiosas a la llegada del espíritu libre y joven. Las conversaciones con mi abuela no eran a cerca de corazones rotos ni de dolores cercanos a mi lejanía. Mi sonrisa se esparcía hasta una desdibujada invisible linea expresando su controversial límite.Uno dos, jugaba a las escondidas con mis muñecas, no con mis sentimientos. Tres cuatro, el tiempo parecía no correr. Cinco seis, corría para girar a la perilla de la puerta y salir a sentir el día en mi piel color nieve, no para huir de mis miedos. Siete ocho, los inviernos eran para formar muñecos de nieve, no para dudar junto a la leña. Nueve diez, los días de libertad y despreocupación se acabaron, la niñez se marcho sin retorno ni dejar pistas sobre su omnipresencia. Solo se fue sin decir adiós, sin decir "hasta siempre". Había comprado un boleto al tren de las nubes, pero con el tiempo se deterioró y se volvió inservible.

                              

                  

En mi mundo no hay dolor que María no me haya prevenido, ella siempre me dijo "está por venir". Las rodillas cansadas de tanto caer, los ojos cansados de tanto llorar. Llueve para abajo y para arriba también. La limosna que le pido al destino termina siendo la misma migaja sin sabor. La sangre fluye sin color como en un río sin caudal, se escapa sin mirar por donde va. Me sostiene el mismo hilo que alguna vez me quitó un diente. Soy el perro que se acuesta en la última vuelta pero después se levanta para hacer dos más y ver que no se equivoco en elegir. Soy el permanente brillo de la sombra que quiere la sonrisa en los demás pero en la suya apenas siente luz. Soy la tierra seca después de ser explotada. Soy la que cuenta y después hereda problemas. Soy tuya, soy mía, soy testigo de los estragos del mundo. Soy de tus ojos porque me llevan lejos de mi el mundo en donde María alguna vez me habló. Tu corazón controla mis latidos.

Cuando todo está muerto

Sentir felicidad completa sin tener que fingir que tu ausencia no significa nada, eso quiero. Llorar sin tu imagen reflejándose en lo más infinito de los momentos jamás vividos, eso sueño. Vivir el resto de mi vida sin preguntarme el por qué, sin tener que buscar culpables, sin tener que mirar al vació sintiéndome llena de desilusión, solo eso anhelo. El cansancio grita en contra de este amor confuso que refriega las cadenas de una nostálgica eternidad en mi cara, que se burla de mis sentimientos y juega con mis frágiles esperanzas marchitas por un corazón que casi no siente, solo palpita. La utopía toma voz de conciencia y me dice que en mis sueños te puedo amar, que me mantenga lo más alejada posible de la realidad."No busques los errores, no busques nada allá afuera. Todo está dentro tuyo". La distancia no ayuda. El tiempo ya hizo su recorrido y no quiere volver a caminar sus pasos. Nuestro momento se fué. Solo quedan lamentos sobre esta pasión prohibida.