martes, 1 de abril de 2014

the still point of a turning world.

suspirar. un respiro, un cálido y seco soplido,
que se escapa de tu boca junto con un cumplido.
quizás sepas, quizás no, por quién o por qué hoy estás medio vivo, buscando entre tus tiempos la manera de pensarlo, de tenerlo cerca en tu cabeza para tomarlo con tu imaginación. y ahí eliges ver ese manto dorado revoloteando en el aire, dejando una estela de aroma a pasión, que lo inhalas, y lo exhalas sin ganas, porque temes que se escape de ti su esencia, dejándote sin inspiración para después. y cierras los ojos con miedo, porque temes que tus sueños sean negros, lluviosos, y que no traigan consigo el radiante sol que se levanta cuando ella sonríe. pero aún así duermes, y lloras, y vives, porque si no fuese por la vida, triste y sorprendente, no conocerías la razón por la que hoy suspiras, y no sabrías cómo se siente conocer a un punto quieto en un mundo que gira.